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Californication


Ficha de la serie:

Nombre original:
Californication
Creador: Tom Kapinos

Sinopsis: Esta serie cuenta los líos sexuales de un escritor fracasado que probó las mieles del éxito hace tiempo y Hollywood lo fagocitó.

Año de comienzo: 2007
Duración: 84 capítulos de 30 minutos en 7 temporadas.
Productora: Showtime

Temporada 1: Irreverente, divertida y sexualmente explícita. Además, tenemos a David Duchovny desmarcándose (Bastante bien, por cierto) de su papel de Fox Mulder para presentarnos un adicto al sexo decadente, egocéntrico y cínico (dicen las malas lenguas que el personaje está basado en su vida real. Al menos lo de adicto al sexo es cierto...).

La serie tiene un lento discurrir donde no pasa gran cosa durante la mayor parte del tiempo. Los personajes se van mostrando pausadamente y evolucionan sólo en momentos puntuales que dan vidilla al asunto. Lo cierto es que son personajes bien pensados para encajar los unos con los otros y que están perfectamente perfilados (salvo la exnovia-mujer del prota, que no sabe nunca exactamente qué siente), pero a la serie le sigue faltando algo de empuje.

Aún así, casi todos los actores hacen un gran trabajo, la trama es lo suficientemente interesante y la acidez con que toca los temas a tratar es realmente agradecida, con algunos toques surrealistas (sobre todo al principio) divertidísimos. Por último, el final de la temporada podría ser perfectamente el final de la serie así que, aunque deje suficientes cabos sueltos para la segunda temporada, no es un gran final que te deje con las ganas.

Yo recomiendo la serie, son sólo 12 capítulos de media hora y consigue arrancarte una sonrisa. No llegará a ser una serie de culto, pero tampoco lo pretende. Disfrutadla.


Temporada 2: La serie (también con 12 capítulos de media hora) presenta unos cuantos personajes de lo más interesante, aunque cierra demasiado abruptamente otras tramas.

Los actores me siguen pareciendo geniales, y las nuevas inclusiones dan más vida al personaje protagonista. Eso, unido a una de las pocas historias de amor medianamente creíbles que hay en la televisión actual, da lugar a una serie bastante interesante.

Sigue la línea de la primera temporada, haciendo evolucionar continuamente a los personajes y metiendo tramas divertidas y surrealistas, aunque bien pensadas... Bueno, no todas. El agente de Hank (el calvo) tiene una trama muy importante a la par que aburrida y poco realista, yendo cada vez a más hasta rozar el absurdo. Es, sin duda, lo peor de la temporada.

La serie ni mejora, ni empeora, se mantiene en su punto. Lo cuál ya es mucho decir, teniendo en cuenta que sigue con una trama fluida que obliga a los personajes a cambiar de una forma realista. Me parece un buen ejercicio de narración, unido a unos buenos actores, lo cuál hoy por hoy es más que loable.


Temporada 3: Reconozco que tengo debilidad por esta serie. El personaje de Hank Moody es lo mejor que ha parido la televisión americana desde hace mucho y la forma de enfrentar las tramas y situaciones es realmente valiente y original. La serie flaquea en algunas cosas (como las tramas del agente de Moody) y tiene un humor que no todo el mundo agradece, pero es una serie realmente cojonuda.

Es más, me gustaría decir que conozco a gente que no le gusta la serie, pero ya no son mis amigos... Pero no es cierto, no conozco a nadie que no le guste. 12 capítulos más totalmente imprescindibles, con algunos giros argumentales impresionantes y una evolución de personajes continua y creíble. Una apuesta segura.


Temporada 4: Por desgracia, no puedo decir lo mismo de la cuarta temporada: Irregular, poco creíble y con una tensión sexual tan difuminada que poco tiene para crear interés. Como serie con chistes de tetas sigue siendo MUY divertida, y su crítica al sistema de Hollywood está bastante bien, pero se ha agotado la fórmula.

Ya en la tercera temporada resultaba algo forzado que todas las mujeres se sintieran atraídas por Hank Moody, pero en esta temporada se convierte en un despropósito, con giros totalmente inverosímiles para Moody o la trama (cada vez menos interesante, si cabe) de su manager. Si desconectas y admites la horrible tontería que es la fijación sexual de las féminas por él, la serie es hilarante. Tiene chistes buenísimos y la lengua afilada, así como secundarios muy divertidos que entran nuevos, así que en ese sentido no pierde ni un ápice.

Además, la serie tiene un precioso final que, desde mi punto de vista, debería cerrar la serie para siempre jamás. No seguiré con esta serie a menos que vea reacciones MUY positivas sobre la quinta temporada.

Temporada 5: Pero no puedo resistirme a Hank Moody y sus chistes infantiles vestidos de sexualidad descontrolada. La perversión de sus guionistas alcanza cotas de depravación bastante altas en esta temporada y parece que sea imposible ver a una actriz con toda su ropa.

La serie ha mejorado un poco, y el personaje de Moody también ha evolucionado lo suficiente para ser interesante, pero no lo suficiente para decir que es un cambio significativo respecto a la anterior temporada. Eso significa que sigue siendo DESPOLLANTE como colección de chistes de penes.

Temporada 6: Esta temporada es un claro ejemplo de que la serie debería haber muerto. Al principio parece que el personaje de Hank Moody va a evolucionar, pero sigue exactamente igual. Los chistes, aunque divertidos, son repetitivos, y aunque han creado personajes muy atractivos para esta temporada, como Hank no evoluciona gracias a (o por culpa de) ellos, tampoco es que la serie mejore mucho.

En resumen, una gran serie que ya está agonizando y pidiendo que la maten.

Temporada 7: Esta séptima temporada es lo mismo que siempre, pero desde el principio te lo venden como un final. Como que todo va a ir bien y... bueno, no es justo. No es justo que Hank Moody, sin cambiar ni un ápice, consiga lo que quiere. Los pocos cambios que muestra no son suficientes porque no son de fondo.

Ya ni siquiera os chistes de penes funcionan, ya que ninguno de los personajes lo hacen. Simplemente agonizan y dan bandazos por una trama absurda que repite lo mismo. Es una serie que debería haber muerto en la quinta temporada (o en la tercera, si nos ponemos) pero que ha seguido herido de muerte, como una ballena varada pidiendo a gritos eutanasia.

Una pena porque empezó genial.