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Me Llamo Earl


Ficha de la serie:

Nombre original:
My Name is Earl
Creador: Greg García

Sinopsis: Earl siempre ha sido un delincuente de poca monta, hasta que un día un golpe de mala suerte le hace recapacitar: El Karma controla sus acciones. A partir de ese día, Earl llevará una lista de sus malas acciones pasadas, con la idea de resarcir a todos los agraviados y así intentar que su Karma mejore, teniendo así una vida mejor.

Año de comienzo: 2005
Duración: 96 capítulos de 20 minutos en 4 temporadas
Productora: NBC

Temporada 1: La primera temporada es maravillosa y crea una idea que se convirtió en el leit motive de la misma: Dar buen rollo.

La realización técnica y la banda sonora son magníficas. Los actores congenian magníficamente entre ellos y los guiones son imaginativos y divertidísimos. Pero ese no es el secreto de Me llamo Earl. Esta serie es buena porque... te hace querer ser buena persona. Te deja con esa sonrisa incrustada en la cara, sin saber muy bien por qué.

MUY RECOMENDADA.


Temporada 2: La segunda temporada es exactamente igual que la anterior, lo que la hace un poco repetitiva. Vemos un interesante y ligerísimo avance en los personajes y, más interesante aún, en el mundo de Earl. Sus buenas acciones repercuten en la sociedad donde vive y consigue que la gente quiera ser mejor persona también.

Y pese a repetirse un poco, la serie sigue siendo altamente recomendable y, encima, tiene un season finale interesantísimo y unos cuantos episodios dobles geniales ¿Lo peor? Muchas tramas se abandonan por simple desidia y nunca se vuelven a comentar siquiera. Es un gran defecto, pero suplido con creces en otros aspectos.


Temporada 3: Para mí, la mejor temporada de todas. No sólo presenta decenas de nuevos personajes, sino que evita repetirse y se reinventa con una facilidad e ingenio impresionante. Quizás por culpa de la huelga de guionistas la serie corre mucho en la resolución de las tramas, pero todo se entiende, todo se quiere y todo consigue, aún a estas alturas, sacarte esa estúpida sonrisa.


Temporada 4: Me llamo Earl sigue siendo una de mis series favoritas. Es cierto que esta temporada ha bajado un poco el listón, que ha vuelto a la idea de la primera temporada, después de dos temporadas creando tramas interesantes, las han dejado (casi) todas de lado sin explicación aparente. Aún así, sigue siendo una serie total y completamente hilarante. Yo la sigo recomendando, claro está, pero que conste que ya la idea empieza a oler un poco a chamusquina repetitiva...

Una pena. Por desgracia, la serie no consiguió financiación para una quinta temporada y se terminó abruptamente, dejando muchas tramas abiertas y dejando un sabor de boca muy agrio.