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House of Cards (US)

Ficha de la serie: 

Nombre original:
House of Cards
Creador: Beau Willimon / basado en la novela de Michael Dobbs

Sinopsis: Frank Underwood tiene muy claro su objetivo en la vida. Ha estado hilándolo todo durante años para que le nombren secretario de Estado cuando el actual Presidente del Gobierno sale elegido. Pero no ocurre. Ahora, y con la ayuda de una joven y ambiciosa reportera, deberá montar un nuevo castillo de naipes para conseguir esa recompensa.

Año de comienzo: 2013
Duración: 73 capítulos de 45 minutos en 6 temporadas.
Productora: Netflix

Temporada 1: Creo que ENORME es el mejor calificativo para esta serie. Una cuidadísima puesta en escena y unos personajes realmente hipnóticos para la primera serie de Netflix, que entra por la puerta grande en el mundo de la producción de series.

Con el espaldarazo de gente de la talla de Kevin Spacey y David Fincher, esta serie iba a ser un éxito seguro, pero el cuidado del guión, la fotografía y, sobre todo, las magníficas interpretaciones, hacen que la serie se salga de la escala.

Es, definitivamente, una obra maestra que todo el mundo debería ver.

Temporada 2: Para esta temporada, la serie se ha tenido que reconvertir. y lo he hecho a lo bestia.

Sigue siendo igual de buena, con momentazos brutales y actores que funcionan a las mil maravillas. Pero incluso con todas estas reinvenciones, la serie ha perdido un algo: frescura. La trama de continuidad es más o menos clónica que la anterior, solo que con un objetivo que está un paso por encima. No sé si por innovar demasiado o por innovar muy poco, pero el resultado final ha quedado algo raro.

Temporada 3: A ver, ¿para qué vas a reconvertirte más si ya estás en lo más alto? Esta serie es imprescindible, hipnótica y muy bien llevada. Robin Wright se sigue comiendo la pantalla cada vez que aparece y el resto de actores están muy cerca de su nivel.

El argumento, fabuloso. La fotografía, maravillosa. La ambientación en general, perfecta.

El único punto negativo de esta temporada (y es una tontá) es el hecho de que Frank Underwood no hable tanto a cámara como antes. Me encantaba y ya es raro verle hacerlo.

Temporada 4: Esta temporada es de paso. Hay presentación de nuevos (y potentes) personajes. Hay tramas que cambian y mutan. Pero no hay conclusión; sólo preparación para lo que vendrá después.

Y la verdad es que funciona. Es vibrante, impactante, duro. Robin Wright y Kevin Spacey siguen siendo unos actorazos impresionantes que pueden llenar cada uno de los capítulos. Y sí, hay cosas que no molan. Hay un cambio a mitad de temporada algo extraño; no un cambio de trama sino de ritmo. Y es raro. Pero principalmente es una gran serie y una buena temporada.

Seguid viéndola.

Temporada 5: Como se veía venir, esta temporada ha sido una explosión de todo lo que venía detrás. La detonación ha sido impactante y ha hecho vibrar el mundo entero de la serie. Todo lo que se esperaba. Pero...

Pero lo cierto es que estoy un poco harto de que los Underwood sean los Sherlock Holmes de la política. Que incluso las cosas que hacen mal son, en realidad, cosas que hacen bien.

Es hipnótico, sí. Pero ya huele. Espero que cierren la serie en breve. En dos temporadas como mucho.

O no. ¡Quien sabe! Porque ese final promete. ¿O no? No sé. Quiero más.

Temporada 6: La producción de esta temporada ha sido muy accidentada por culpa de la ejecución pública de Kevin Spacey (actor, no personaje), lo que ha obligado a concluir todo de manera rápida...

Rápida pero no atropellada. House of cards sigue siendo un reloj de precisión que apuntala hasta el último segundo, plantea todo con minuciosidad y sigue siendo tan absorbente como siempre.

Robin Wright está increíble y llena la pantalla en cada plano. Es una serie jodidamente increíble.