Nombre original: Love, Death + Robots
Creador: Tim Miller.
Sinopsis: Una antología de capítulos autoconclusivos con una única premisa común: Hay amor, muerte... o robots.
Año de comienzo: 2019
Duración: 18 capítulos de 10 minutos en 1 temporada / todavía en emisión.
Productora: Netflix.
Temporada 1: Esta serie se puede ver de dos maneras.
Una manera es concebirlo como un ejercicio de estilo, con diferentes estudios de animación creando obras muy diferentes con estilos visuales muy marcados.
En ese sentido, esta serie es una gozada y no tengo más que halagos al respecto. Es muy variada y los capítulos son lo suficientemente cortos como para que siempre te pique el gusanillo con otro más. Además, Netflix muestra los capítulos siempre en órdenes al azar, así que tu manera de vivir la antología será siempre diferente a la mía.
Otra manera de concebirlo es como una antología con un sentido único. Como un vehículo para el mensaje: amor, muerte y robots. Ahí falla más que una escopeta de feria.
Por lo pronto, el amor está planteado casi por completo como sexo, los robots como amenazas (más o menos coña) y la muerte... bueno, no tiene mucho de filosófico, fin de ciclo o como lo quieras llamar. No. Al final es una serie bastante limitada narrativamente hablando, que solo toca dos o tres palos y se golpea en el pecho como si tocara todos los palos del universo.
En definitiva, una serie muy bonita para mirar con el cerebro apagado, pero ¡cuidado con no encenderlo por error a mitad de episodio!