Nombre original: Kidding.
Creador: Dave Holstein.
Sinopsis: Jeff Pickles lleva 30 años como protagonista de su propio programa televisivo para niños. Pero hace un año murió su hijo y todavía no ha sido capaz de procesarlo.
Año de comienzo: 2019
Duración: 20 capítulos de 30 minutos en 2 temporadas.
Cadena: Showtime.
Temporada 1: Esta serie es muy tramposa porque te engatusa con dos nombres: Jim Carrey y Michel Godry, lo que directamente te hace pensar directamente en The eternal sunshine of a spotless mind. También su tempo y algunas de sus ideas principales. Pero en medio de todo eso, hay una idea que no pertenece a ninguno de los dos.
Porque, dejando de lado todo eso, la serie es solo una más de la nueva oleada de nueva comedia. Personajes raros haciendo cosas turbias con un trasfondo de humor detrás.
No hay ideas especialmente imaginativas ni interpretaciones especialmente inspiradas (nada malo, pero tampoco nada espectacular) y lo único que salva el día es la ingeniosa dirección y su maravilloso uso de las marionetas. De nuevo, una serie del montón con un genial uso de los efectos especiales prácticos.
Temporada 2: La serie termina más o menos de manera satisfactoria. Tiene buenas ideas y los actores tienen personajes mejor definidos que en la primera temporada, pero lo cierto es que el humor brilla por su ausencia incluso más. La serie sigue en su estado anodino y con un interés poco trabajado, pero al menos en esta temporada trae unas cuantas perlas que hacen que merezca la pena toda la serie.
Por un lado, el episodio infantil que cuenta lo que es un divorcio me parece maravillo. Y por otro, el episodio final con esos simples pero impresionantes efectos especiales. Grandísimo acierto los dos.