Nombre original: Berlin Alexanderplatz
Creador: Rainer Werner Fassbinder.
Sinopsis: Berlín, 1928. Frank Biberkopf sale de prisión con la firme determinación de ser una persona mucho mejor que cuando entró. Por desgracia, el mundo en el que vive no se lo pondrá fácil.
Año de comienzo: 1980
Duración: 14 episodios de una hora en una temporada.
Productora: WDR, RAI.
Serie completa: ¡La serie que lo inició todo! Esta serie es considerada como el comienzo de la nueva horneada de series, como el principal culpable de que series como Los Soprano o Twin Peaks hayan tenido lugar. Su montaje, el uso de personas de moral malvada como protagonistas y su ritmo pausado creó escuela. Una escuela que, a día de hoy, ha traído algunas de las series mejor consideradas de todos los tiempos.
Era evidente que yo, como buen arqueólogo de series que me considero, la vería antes o después.
Pero por desgracia la serie no me ha gustado. El transcurso es muuuuuuuuuuuuy lento y los personajes marean la perdiz durante escenas y escenas donde nadie sabe a dónde quiere llevar la acción. El uso de los espacios es limitado como poco y los actores muy estáticos. Supongo que es cosa del momento, que en aquel entonces hacer una serie conllevaba unos recursos técnicos que, a día de hoy, darían para mucho más. Pero el efecto es que la serie es monótona y previsible visualmente hablando.
Además, la trama es taaaaaan machista que duele (todas las mujeres de la trama se enamoran del protagonista y se doblegan a todo lo que él quiere). Supongo que dirán sus defensores que es "un producto de su época", pero ese eufemismo no me vale. Sí, es un producto de su época en cuanto a mostrar el Berlín pre Segunda Guerra Mundial y en cuanto a mostrar una moral extraña como normal. Pero hay otras cosas que no están bien, y las hace todas.
Pero basta de hablar de lo malo. Esta serie planta muchas semillas que incluso series actuales intentan recoger y hacer suyas. Me encanta algunas partes de su narrativa, como esos momentos en que un narrador totalmente desapasionado explica sucesos terribles. O cuando superpone narraciones de eventos normales sobre imágenes grotescas. Plantea un mundo y un punto de vista que dudo que se hubiera visto antes en el mundo de las series y que pocas veces se ha visto después.
Así que, muy bien como descubrimiento. Regulero o malo como ficción.